Ghee, oro ancestral para sanar desde dentro

El Ghee es una grasa láctea anhidra procesada a partir de la mantequilla, en la cual se separan los sólidos lácteos y el agua de la grasa. Este proceso de clarificación concentra las propiedades benéficas de la mantequilla, destacando principalmente el ácido butírico, un ácido graso de cadena corta que es un sustrato energético fundamental para las células del colon. El ácido butírico estimula la absorción de sodio y agua en el colon, favoreciendo la salud intestinal.

Una de las propiedades más destacadas de la Ghee es su contenido de ácido linoleico conjugado (CLA), un ácido graso poliinsaturado que se asocia con beneficios para la salud cardiovascular, reducción de la inflamación y mejora del perfil lipídico.

Beneficios Terapéuticos del Ghee

• Salud intestinal: La Ghee reduce la inflamación y promueve la salud intestinal. Ayuda a restaurar la integridad de la mucosa intestinal y el epitelio digestivo, facilitando la digestión al promover el agni digestivo (fuego digestivo), especialmente en el intestino delgado, sin aumentar el dosha Pitta.

• Fortalece los tejidos: En Ayurveda, el Ghee es conocido por su capacidad para incrementar la esencia y la vitalidad de todos los tejidos (dathus), lo que incluye la mejora de la visión y la fortaleza general del cuerpo.

• Función hepática: Promueve la función hepática sin obstruir el hígado, como ocurre con otros aceites. El ghee fortalece el hígado y apoya su capacidad desintoxicante.

• Mejora la claridad de la voz, favorece una buena complexión, proporciona fuerza y energía.

• Promueve la longevidad: Al ser rico en antioxidantes, el Ghee protege las células del envejecimiento prematuro al reducir el daño causado por los radicales libres.

• Cuidado dental: El Ghee también se utiliza en Ayurveda para fortalecer los dientes y encías. A través de la práctica de oil pulling (enjuagues con Ghee), se puede limpiar la boca, reducir la placa, fortalecer las encías y mejorar la salud bucal general.

Composición Nutricional del Ghee

La composición de la Ghee varía dependiendo de la calidad de la mantequilla utilizada, pero en términos generales, por cada 100 gramos de Ghee, encontramos:

• Calorías: Aproximadamente 107 kcal por cucharada.

• Vitaminas: A y K2, esenciales para la salud ocular, ósea y la coagulación sanguínea.

• Minerales: Calcio, fósforo, cromo, zinc, cobre y selenio, que contribuyen a la salud ósea y la función metabólica.

• Antioxidantes: En pequeñas cantidades, pero suficientes para tener efectos beneficiosos en la protección celular.

La Ghee se obtiene preferiblemente de mantequilla ecológica de vacas alimentadas con pasto, lo que asegura una mayor calidad nutricional.

Propiedades Adicionales del Ghee

• Salud cardiovascular: La Ghee ayuda a mejorar el perfil lipídico o el “panel de lípidos”, regulando las concentraciones de grasas en la sangre. Su contenido de ácidos grasos saludables también promueve la salud cardiovascular.

• Sistema nervioso: Es un excelente nutriente para fortalecer el sistema nervioso, mejorando la memoria y la concentración.

• Longevidad y anti-envejecimiento: Gracias a sus propiedades antioxidantes, el ghee ayuda a retrasar los efectos del envejecimiento, protegiendo las membranas celulares y favoreciendo la regeneración celular.

• Digestión y absorción de nutrientes: La Ghee favorece la asimilación de nutrientes liposolubles, actuando como un medio para que los nutrientes sean absorbidos eficazmente por el cuerpo.

• Tratamientos digestivos: Es útil en la gastritis, el reflujo ácido, la acidez estomacal y las úlceras, ya que calma y suaviza la mucosa gástrica. Además, la acción del ácido butírico ayuda a mantener niveles saludables de insulina y reduce la inflamación en el intestino.

Uso Trastornos Digestivos

• Estreñimiento: La Ghee lubrica el tracto digestivo, favorece el tránsito intestinal y la desintoxicación hepática. Es especialmente eficaz para tratar el estreñimiento crónico.

• Salud ósea: El ghee es rico en vitamina K2, un nutriente esencial para la salud ósea y la coagulación sanguínea. Esto lo convierte en un aliado importante para fortalecer los huesos.

• Salud ocular: Su capacidad para mejorar la salud de los ojos es muy apreciada, sobre todo en la prevención de problemas de visión relacionados con el envejecimiento.

• Diabetes tipo2 y salud intestinal: Gracias al ácido butírico, la Ghee ayuda a regular los niveles de insulina, aportando beneficios a quienes padecen diabetes tipo2. Además, proporciona alivio a personas con enfermedad e inflamación intestinal. Del mismo modo, este ácido graso es clave para la recuperación de intestinos con permeabilidad aumentada, fortaleciendo la barrera intestinal y restaurando su función protectora.

Composición nutricional por 100g de mantequilla ecológica:

• Valor energético: 876 kcal (45,8 % del CDRC)

• Grasas totales: aprox. 99,5 g

  
  

• Grasas saturadas: 62,5 g

• Grasas monoinsaturadas: 26,4 g

• Grasas poliinsaturadas: 3,2 g

  
  

• Carbohidratos: 0 g

• Proteínas: 0,28 g

• Fibra: 0 g

Minerales (pueden variar según la calidad y origen):

• Sodio: bajo contenido

• Calcio: 24 mg

• Fósforo: 24 mg

• Potasio: 18 mg

• Magnesio: 2 mg

• Hierro: 0,02 mg

CDRC = Cantidad Diaria Recomendada por Consumo.

Recomendaciones para el uso de la Ghee

La Ghee es un alimento que se adapta a la mayoría de las dietas, aunque debe consumirse con moderación. Es especialmente adecuado para equilibrar Pitta y Vata, pero en grandes cantidades puede incrementar Kapha, por lo que se recomienda un uso equilibrado.

Cómo hacer Ghee en casa – Receta tradicional y tipos de elaboración

Tipos de elaboración de Ghee:

1. Ghee tradicional (casero):

   La receta que hemos compartido, usando mantequilla ecológica sin sal, es la forma más tradicional de hacer Ghee. Se utiliza mantequilla de vacas alimentadas con pasto y se derrite lentamente para eliminar el agua y los sólidos lácteos. Es el Ghee más puro, ideal para quienes buscan una preparación casera auténtica y nutritiva.

2. Ghee industrial o comercial:

   Este tipo de ghee se produce en fábricas, donde el proceso se acelera utilizando maquinaria industrial. Puede que se usen mantequillas de menor calidad, y, aunque el proceso de clarificación es similar, en muchos casos se añaden conservantes para prolongar su vida útil.

3. Ghee clarificado con hierbas (herbal Ghee):

   En Ayurveda, la Ghee también se prepara con hierbas específicas como el Ashwagandha, Turmeric o Brahmi, que se infusionan en la Ghee caliente. Este tipo de Ghee se usa en tratamientos terapéuticos, y se le atribuyen propiedades adicionales como la mejora de la memoria, la reducción del estrés o la revitalización.

Fórmula química de Ghee:

La Ghee es una mantequilla clarificada, lo que significa que ha sido cocida a fuego lento para eliminar el agua y los sólidos lácteos. Su composición química varía dependiendo de su origen, pero en términos generales, La Ghee está compuesto por:

• Grasas saturadas: Aproximadamente el 62-64% de su contenido son ácidos grasos saturados. Estos ácidos grasos, como el ácido butírico (C4H8O2), son beneficiosos para la salud intestinal y el sistema inmunológico. El ácido butírico también tiene propiedades antiinflamatorias y es un combustible ideal para las células del colon.

• Ácidos grasos monoinsaturados: Representan alrededor del 29-32%. Entre ellos se encuentran el ácido oleico (C18H34O2), que también se encuentra en el aceite de oliva, conocido por sus beneficios sobre la salud cardiovascular.

• Ácidos grasos poliinsaturados: En menor cantidad, alrededor del 3-5%. Esto incluye el ácido linoleico, que pertenece a los ácidos grasos omega-6.

• Vitaminas liposolubles: La Ghee es rico en vitaminas A, D, E y K, que son esenciales para la salud ósea, ocular, del sistema inmune y antioxidante.

• Colesterol: Contiene colesterol, aunque en su forma natural no se asocia con los riesgos del colesterol procesado. La Ghee ayuda a mantener equilibrados los niveles de colesterol HDL (bueno).

Cómo hacer Ghee en casa – Receta tradicional

Ingredientes:

• 500 g de mantequilla ecológica sin sal (idealmente de vacas alimentadas con pasto).

Preparación:

1. Coloca la mantequilla en una olla de fondo grueso y enciende el fuego a temperatura media para derretirla de forma uniforme.

2. Al principio, la mantequilla formará una espuma densa en la superficie y comenzará a hacer un chapoteo característico: es el agua que se va evaporando.

3. No retires la espuma. A medida que el proceso avanza, el chapoteo se irá reduciendo hasta detenerse por completo.

4. En ese momento, baja el fuego al mínimo para evitar que se queme. Los residuos sólidos de la leche se irán al fondo, dejando el líquido dorado y transparente en la parte superior.

5. La Ghee estará listo cuando, al comprobar que los residuos al fondo están marrón, el liquido estará de color dorado transparente, una fragancia suave y agradable.

6. Apaga el fuego y deja reposar unos minutos. Luego, cuela la Ghee utilizando una tela de algodón limpia, que debe usarse exclusivamente para este propósito, para asegurarte de que quede libre de impurezas y residuos sólidos.

7. Guárdalo en un frasco de vidrio previamente limpio y esterilizado, dejar en la parte mas fresca de la cocina hasta que se solidifique. No necesita refrigeración, ya que el proceso de clarificación elimina el agua y la lactosa, lo que lo preserva por mucho tiempo.

Elegir la Ghee es elegir una forma de nutrirnos desde la raíz, con respecto por la tierra, por el alimento y por nuestro cuerpo.

en su simplicidad y néctar milenario nos enseña que la verdadera medicina nace del calor, la paciencia y la transformación.

Ya sea en una cucharada sobre la comida , en una gota sobre la piel o en el amor con que lo preparamos, la Ghee es una caricia que alimenta desde lo mas profundo de nuestro ser.